København

Cuántas ganas teniamos de conocer Copenhague! Y hoy, por fín nos hemos liado la manta a la cabeza y hemos pasado allí el día.La escasa distancia entre los dos paises lo permite, así que resultaba inevitable visitarla, ahora que la cuenta atrás ya ha empezado y se van los dias del calendario.
København, en danés, presume de una inteligente planificación urbanística, moderna y que tiene muy en cuenta al peatón, así que resulta una ciudad fácil y cómoda para visitar.No se conocen los atascos de tráfico en ningún momento del día y la mayor parte del centro histórico es peatonal.Dicen que en hora punta hay más bicis que coches!
Me atrevería a decir que me parece más atractivo, estiloso y sofisticado todo lo danés comparado con lo sueco: diseño, ropa, juguetes, decoración, repostería...eso sí, en cuestión de oido, el sueco suena como una canción a diferencia del danés, con un tono monótono y aburrido.
Sólo ha sido una mínima pincelada para una muy interesante ciudad a la que volveremos, pronto, sin duda.

Våren är här!

Con los termómetros en positivo toda la semana empezamos a percibir los primeros dias de primavera y cómo no, la temporada marca sacar las herramientas al jardín y salir de la madriguera.
Ya asoman los primeros brotes de color y el dia amanece pronto y me llama la atención las flores de un árbol en el jardín.Son flores suaves de terciopelo gris y se las conoce como "Vide". Incapaz de encontrar sinónimos en inglés o español, poco más sé de ellas.Ya me sorprendieron el año pasado y ahora que puedo prestarles más atención percibo que deben ser un símbolo en el calendario. Venden ramas enteras en flor en las mil y una floristerias y hoy, qué casualidad, me las he encontrado en el café Krook y me han hecho compañía...

Black Swan

Ayer pusimos el turbo: baños, cenas rápidas, lechitas con cereal, cuento de buenas noches y muac muac a soñar con los angelitos y en menos de un cuarto de hora estábamos sentados escuchando el Movierecord. Ventajas de ir al Bio un miércoles cualquiera, en una ciudad pequeña de un país casi deshabitado que a esas horas está ya en el séptimo sueño...Eso si, sin muchas pretensiones cinéfilas ni de entender nada, dispuestos a ver Black Swan en versión original y subtitulada en sueco, casi ná!!!
Pués ni pestañear.Quedé encantada con la película y con Natalie, sublime en el papel de bailarina de élite disciplinada que busca cómo convertirse en black swan y llegar a la ansiada perfección.
No os cuento ni el argumento, ni las críticas, ni los premios.Seguro, la conoceréis de sobra...pero si os la recomiendo.
La película me reafirmó lo apasionante que resulta el mundo del ballet clásico, siempre me ha maravillado, desde pequeñita que tuve la suerte de vivirlo de cerca, no en mis propias carnes pero casi.
Apenada confieso que me hubiese encantado probarlo, ser bailarina de piel blanca y fina, con moño alto de red y horquillas, con torso plano y escuálido, empeines salientes y juanetes sangrientos, zapatillas de punta...Bailar el Cascanueces.Girar, girar hasta volar...
Admirable la entrega y sacrificio de los bailarin@s que hacen de la danza su vida.
Bello, realmente bello.